María, vecina de Molina, ha estado 15 días acostada
en una toalla embadurnada de aceite de coco con
el fin de aparecer en el pueblo más negra que un ojete.
La pobre ha perdido el moreno en dos días y está
al borde de la depresión.
“He tirado 15 días de mi vida
a la basura y encima llego al pueblo y me entero de que
no hay fiestas por no se qué de un virus” Declaraba
esta mañana a Molina Today, pajiza y con ojos tristes.
Por alguna razón hay personas que quieren ser negras
al contrario que Michael Jackson y luego ven a un negro
y se creen que les va a vender una pulsera.
En fin, cosas de Molina.